El bullying, como sabemos, se presenta en diversas y variadas situaciones y formas. Este tipo de situaciones no distingue entre nivel social o sexo, lo que lo hace aparecer en diferentes contextos. Las causas del bullying son muchas, así como también las consecuencias desastrosas que puede dejar a su paso, si se hace caso omiso cuando estamos frente a una circunstancia en que haya bullying, también llamado acoso escolar.
La forma en que la víctima o quienes son observadores se enfrentan a los casos de bullying es crucial para tratar este tipo de situaciones. No obstante, personas externas que actúan como intermediarios, deben generar una estabilidad en el ambiente escolar que propicie a la buena relación entre todos los estudiantes mediante acuerdos, escucha y solución de conflictos entre los mismos.
Esta intervención por parte de los padres, directivos y profesores del plantel, es sumamente importante para evitar y tratar casos de acoso escolar. Para que esto pueda llevarse, es necesario que las personas que están siendo directamente perjudicadas y los observadores, informen sobre la situación que se está dando y así, evitar consecuencias graves y devastadoras.
Se puede pensar que los únicos que tendrían consecuencias debido a las agresiones psicológicas y físicas son las víctimas. Sin embargo, los efectos que produce el bullying afectan a todas las partes.
Consecuencias hacia la víctima
Para las víctimas las consecuencias son muchas y en esta medida, profundas. Estas, pueden constar de una baja en la autoestima, posturas pasivas e indiferentes, algunos trastornos emocionales, depresiones, ansiedad y en el más grave de los casos: los pensamientos suicidas que lo conducirán a la muerte. Otras consecuencias son:
-Pérdida de interés relacionada a los estudios (bajo rendimiento escolar) y temor para ir al colegio.
-Estado de ánimo: triste y deprimido (aparentemente llora sin razón para sus padres)
-Dolor en el estómago, pecho, cabeza
-Presenta náuseas, vómito y pérdida del apetito
-Dificultad para dormir
Cabe aclarar, que estas consecuencias varían, además no son exclusivas de los casos de bullying, hay otras razones por las que esto puede darse. Es por esto que, antes de dar un diagnóstico, se debe hablar con la persona e investigar para dar con el resultado.
Hacia el agresor
Se cree que un gran número de los agresores pueden estar vinculados a bandas delictivas, lo que aumenta el nivel de violencia y agresión. Entre las consecuencias para quien propicia las situaciones de acoso escolar, son:
-Complica la convivencia con sus semejantes
-Al presentarse la situación, se ve en la obligación de continuar para no perder poder y “respeto”
-Busca sentirse autoritario y es sumamente violento
-Es vulnerable a cometer actos delincuenciales (en algunos casos)
-Estado de ánimo: casi siempre está irritado, es impulsivo y es poco tolerante
-Para obtener lo que quieren, aplican la agresión física y las amenazas
-Sienten la necesidad de manifestar y mostrar el poder que tienen sobre los demás
Hacia los espectadores
Muchos de los espectadores que inevitablemente se incluyen como componentes en los casos de bullying o acoso escolar, se sienten amedrentados por la fuerte violencia que perciben hacia las víctimas directamente. Esto, los lleva a pensar que no es posible detener la situación o que, los agresores podrían tomar represalias hacia ellos por intentar defenderlos o informar a las directivas sobre lo que está pasando. Cuando se está en esta situación, se pueden adoptar pensamientos, como:
-La indiferencia ante lo sucedido
-Aceptación y resignación porque es algo aparentemente común
-Esto conlleva a tener actitudes egoístas para no intervenir
-El acto neutral, asume una injusticia que es fortalecida por los observadores
-Esta postura es inadecuada e imparcial y no se defienden los derechos
-Aguardan insensibilidad y crueldad al ser testigo de abusos y sufrimiento procedente de la víctima.