El papel de los padres y maestros es sumamente fundamental para poder detectar los casos de acoso escolar o también conocido como bullying escolar. Los números de acoso escolar que logran denunciarse van en aumento, sin embargo, en muchas ocasiones, el niño o menor víctima del acoso escolar, ya se encuentra perjudicado significativamente.
Para los niños es muy difícil poder hablar con un adulto, especialmente si los tienen amenazados. Son muchos los factores que llevan a que un niño interiorice sus sentimientos y pensamientos sobre lo que está viviendo y tristemente sucede con más frecuencia de la que se cree. No obstante, esto no es una excusa para no poder tratar los casos de acoso escolar, ya que existen diferentes métodos y formas en las que el acoso escolar puede ser detectado.
Índice de contenido
1. Conductas inusuales
Cuando un niño empieza a modificar y cambiar su comportamiento, es la primera señal de que algo no está bien. Un ejemplo de estos cambios de conducta, son por ejemplo las falencias y el bajo rendimiento en el colegio, el niño puede mostrarse irritable y de mal genio, ya no quiere compartir tiempo con su familia, entre otras señales. Otro trastorno de conducta, puede ser la alteración de un niño naturalmente tranquilo, a uno más molesto y totalmente diferente. También aplican los casos de actitudes tristes, silenciosos y generalmente no dicen con exactitud lo que pasa o simplemente evaden las preguntas.
2. Aparente tristeza
Aunque bien podría estar en anterior punto, esto no sólo se trata de una conducta, sino de una sensación y una carga interna que podría exteriorizarse. Si un niño se muestra triste la mayor parte del tiempo, llora con frecuencia y no manifiesta alguna explicación, podría ser un caso de acoso escolar lo que esté sufriendo. Usualmente no suelen revelar fácilmente lo que les pasa porque están amenazados, se sienten inseguros o no cuentan con la suficiente confianza con sus familias.
3. Trastornos del sueño
El miedo y el terror puede ser tan intenso e importante para los niños, que pensar todo el tiempo en el caso de acoso escolar del que están siendo víctimas, podría ser el impedimento para lograr descansar plácidamete. Para ellos puede ser mucho más difícil lograr dormir, ya que generalmente tienen muchas pesadillas.
4. Manifestaciones físicas
Muchos de los dolores y malestares psicológicos suelen manifestarse a través de malestares en el cuerpo, es decir, se manifiestan de manera física. Algunos de estos indicios podrían ser:
5. Excusas y mentiras
Si repentinamente el niño empieza a presentar un rechazo hacia la escuela, una razón de ello de mayor posibilidad, sería un caso de acoso escolar. El niño empieza a poner una serie de excusas para no asistir al colegio, miente sobre si tiene clase o no, e incluso si se le obliga a asistir, el niño presenta un bajo rendimiento, malas notas y demás.
6. Evitan las relaciones interpersonales
Un niño víctima de acoso escolar puede llegar a sentirse tan mal consigo mismo, que empezará a guardar y no soltar sus sentimientos, emociones, pensamientos y hasta anécdotas a tal punto que dejará de compartir con sus compañeros de colegio, amigos del barrio, etc. Incluso los niños podrían evitar a toda costa relacionarse con otras personas, lo que los lleva a aislarse frecuentemente.
Identificar el acoso escolar, es posible y todo está a nuestro alcance para ello. Es necesario que una vez identificado el caso, se procedan a tomar serias medidas, pero el primer paso siempre será, ganarse la confianza del niño para que pueda expresar todo lo que siente y lo que le ha pasado.
